Hacepocas horas, se desarrollo una nueva marcha, contextualizada en un paronacional convocado por la CONFECH, y otras asociaciones gremiales participesdel sistema educativo nacional.
Porlas calles de Santiago y algunas capitales regionales, pudimos observar einformarnos vía diferentes medios de comunicaciones, las acciones y marchas quese llevaron a cabo durante esta mañana. Más que comentar lo que aquí ocurrió,me gustaría analizar las lamentables palabras del Sr. Ministro de EducaciónHarald Beyer, ante estas marchas y la convocatoria a paro nacional.
Enun país y sus autoridades que se jactan de considerarse como una democraciaestable, consolidada y abierta al mundo, me parece por decirlo menos, insólitolas palabras del Ministro, el que nos dice: “No se pueden imponer propuestasdesde la calle”.
Lamentablementeel ministro aun no tiene claro que en una democracia no solo deben existirmecanismos oficiales para discutir, como lo son el senado y cámara dediputados, sino que también tienen que existir los mecanismos jurídicos paraque la sociedad pueda expresarse, y esto es lo que hemos visto hoy.
Cuandohablamos de construir un sistema educativo participativo, respetuoso de lasdiversidades y liberador, sumado a la calidad y la condición de derecho quedebe tener, es incomprensible que una alta autoridad, se niegue a ver yescuchar estas propuestas de la calle.
Lavocación anti-democrática expresada por el Sr. Ministro estas últimas horas, nohace más que confirmar que este gobierno no tiene la intención de solucionarlas problemáticas del sistema educativo, o por lo menos no es con la voz de lacalle, con los reales participes del sistema, con quien quiere solucionarlos.
Unverdadero sistema educacional inclusivo, se construye siendo capaz de tomar encuenta y escuchar a todos sus actores, a toda la sociedad.
¿Alguien sabe si el ministro sabe algo de democracia?